En 1974 el glorioso fútbol uruguayo venia cascoteado. Uruguay venía de ser bailado por Holanda en el mundial. El fútbol celeste estaba de “bajón”. Había sido la peor participación en un mundial hasta ese momento. Incluso una de las quejas de aquel proceso, que tomó como propia Liverpool también, fue que Roberto Porta dejara fuera del plantel a Saúl Rivero. Liverpool había tenido en ese proceso de selección otros jugadores, como Pedro Alvárez o Denis Milar. Sólo el rochense irá al mundial representando a Liverpool.

Arrancado el devaluado torneo uruguayo, ya comenté en otra nota que la primera rueda negriazul fue buena, pero la segunda fue sencillamente maravillosa. Y el gran factor, o uno de los principales, fue la explosión de Denis Milar, que pasó de convertir 3 goles en la primera a 13 en la segunda.

De la mano de Denis y Saúl en cancha, y de don Ondino en el banco, en la primera rueda terminamos terceros. Perdimos contra Peñarol, a la postre el campeón, por 4 a 0. Cuando nos volvemos a cruzar, en la penúltima fecha de la segunda rueda, Peñarol ya era campeón. Fuimos locales pero fijamos el Centenario. El antecedente previo de cada uno era muy bueno: la fecha anterior había tenido una goleada 3 a 0 de Peñarol a su tradicional rival, y una goleada 4 a 1 de Liverpool a Fénix, con tres del imparable Denis Milar. Venían entonados los dos equipos.

Se jugó en la noche montevideana. Se vendieron 13749 entradas, recaudándose algo más de 11 millones de nuevos pesos. Martínez Bazán el juez, secundado por Cerillo e Ibarra. Liverpool saltó al campo de juego del Estadio con  Darwin Dalmás; Edison González y Francisco  Campo; Eleuterio Marrero, Saúl Rivero y José Maldonado; Pedro Álvarez, Nelson Agresta, Nelson “Chupete” Hernández, Denis Milar y Héctor “El loco” Rotela. Peñarol jugó con Corbo, Sandoval, Fernández, González, Rivera, Custodio, Zoryez, Quevedo, Jiménez, Unanue y Morena, dirigidos por don Hugo Bagnulo.

 

Sin dudas el partido era esperado porque prometía buen fútbol. El campeón contra el equipo sensación. Y el partido cumplió con las expectativas. Y de entrada. Porque en el arranque el “Chupete” se la lleva hasta la línea de fondo y manda un centro rasante atrás que agarra Pedro Alvarez, le gana a Zoryez y termina con pelota y todo adentro del arco.

 

El partido siguió parejo hasta que un tiro de Fernando Morena da en el palo y en el rebote cuando la va agarrar de nuevo Morena, Campo le comete penal que el propio 9 convierte. Se ponía la cosa 1 a 1. Pero la “ley penal” le dará a los dos minutos la ventaja de nuevo a Liverpool, cuando la zaga aurinegra obstruye la entrada al área de Denis Milar. El rochense cambia penal por gol y Liverpool otra vez arriba. Y para confirmar que ese era el partido de Liverpool, cuando estaba terminando el primer tiempo Denis realiza gran corrida que termina en un centro que el “Loco” Rotela remata rodeado de aurinegros y por sobre Corbo. Es golazo. Liverpool termina ese primer tiempo ganando 3 a 1.

 

El segundo tiempo fue de cambios para los aurinegros buscando el descuento. Pero Liverpool se defiende bien y espera. Y a los 20 minutos esa estrategia da sus frutos. Maldonado se interna en ataque, se la da al “Chupete” Hernández y su remate vence a Corbo. Así se daba la goleada del “Negro de la cuchilla” al campeón en su cancha. En el final del partido serían cobrados dos penales más. Peñarol se puso 4 a 2 con gol de penal de Morena, pero Denis tiene otro en sus pies que no falla y pone el 5 a 2 final.

 

Hasta ese día fue la goleada más grande ante Peñarol, superada luego por el 4 a 0 de 2004 del que ya escribí. Pero esos 5 goles fueron la mayor cantidad de goles que le hicimos a Peñarol en un partido en nuestra historia. Dos de ellos de la estrella del campeonato, Denis Milar, elegido mejor jugador del año. Me comentó por chat, cosa que agradezco mucho, lo siguiente sobre ese partido: “ Recuerdo que ganamos con mucha solvencia, yo convertí dos de penal, un gran triunfo que la hinchada festejó con gran alegría. Demostramos que estábamos a la altura de los equipos grandes y para salir campeones pero lamentablemente no lo logramos. Los grandes nunca salían del Centenario, siempre eran locatarios y eso es demasiada ventaja”…..sin embargo esa ventaja del Centenario no le alcanzó ese 15 de diciembre. Ese día a Liverpool no le ganaba nadie.